top of page
Logo Orillas-02.png

Emprender siempre implica propósito y generar impacto

  • ORILLAS DOSSIER
  • 6 sept 2024
  • 4 Min. de lectura

Actualizado: 18 oct 2024

El emprendedor argentino Juan Collado (49), que eligió radicarse en Uruguay hace ya tres años, nos cuenta de sus incursiones en diversas áreas. Radiografía de un emprendedor nato: fundador del grupo industrial forestal Tapebicuá, también dirige una hilandería en La Puna y una red de recarga para vehículos eléctricos.




A lo largo de tu vida estuviste involucrado en distintos proyectos. ¿Qué significa emprender para vos?


Si, en los últimos veinte años hice un montón de cosas. Te diría que el denominador común tiene que ver con una vocación por hacer. Y ese hacer implica siempre un propósito, dirigido a algo. Creo que hay una épica de transformación muy relevante que entusiasma y apasiona y ese es siempre el punto de partida. El alma de ese hacer siempre es la idea de transformar la realidad, de generar impacto en la sociedad.


Uno de tus emprendimientos más importantes es Hilandería Warmi. ¿Qué podés contarnos?


Sí, es un proyecto que nació hace unos 10 años pero que tiene una historia muy interesante. Yo venía trabajando en apoyar el sistema emprendedor a través de Endeavor. Y fue así como al hacer el capítulo del NOA (noroeste argentino) empezó a tomar forma la idea. Es una zona de Argentina – que además de ser muy linda – es muy particular por ser quizás la más latinoamericana de todas. Una de mis obsesiones siempre fue rescatar esa identidad ancestral y los saberes que allí convergen. Fue así como encontré una hilandería con 100 años de historia y también a Rosario Quispe, una mujer clave en todo esto. Ella – nacida y críada en La Puna – con un puñado de mujeres crea una asociación en el año 95 destinada a promover la actividad económica en la zona. Esa época fue muy difícil para La Puna porque se habían retirado muchos proyectos mineros y se había generado mucho desempleo y peligraba la subsistencia de muchas familias. Rosario conseguía fondos de filántropos para dar microcréditos para mujeres. Y es ella quien me habla de la hilandería.



Una hilandería con historia...


Sí, la primera vez que fui encontré trastos viejos, todo un poco abandonado. Había sido fundada en 1920 por decisión del gobierno de la provincia de ese entonces, buscando erradicar la pobreza en la zona. Pero con el transcurso de los años fue cambiando de manos sin un rumbo ni un destino productivo cierto. Pero lo que más me sorprendió fue la energía cuando estuve ahí por primera vez. Mi cabeza empezaba a imaginar el potencial de todo eso funcionando. Recuerdo el momento exacto en que me paré al lado de la urdidora y ahí visualicé el proyecto.


Además de la puesta en valor de la tradición y los saberes de la zona, también hay un rol clave de la mujer.


Warmi Sayajsunqo – así es el nombre completo – significa “mujeres perseverantes” en quechua.


¿Cualés son las premisas de Warmi? ¿Cómo se combina el impacto social con la viabilidad del emprendimiento?


Yo pienso Warmi como una empresa social, que funciona bajo una lógica capitalista pero sensible. Me interesa rescatar el hecho de que proyectos de este tipo son viables. Hoy por hoy y con 10 años de recorrido y más de 40 personas trabajando los resultados son muy buenos. En tiempos del fast-fashion nos concentramos en hacer un producto de calidad, utilizando fibras naturales, de llama principalmente. Tenemos presencia en distintos países del mundo y nos apoyamos muchísimo en el e-commerce y la trazabilidad de los productos, uniendo las puntas entre el consumidor y el origen.



Uruguay. ¿Cómo fue el cambio?


Siempre Uruguay fue un país muy cercano para mí. La decisión de venirme fue acertada y hoy puedo decir que encontré lo que buscaba y más. Es un país increíble que creo está viviendo un momento espectacular, están pasando muchísimas cosas que son game changers. Más allá de la transformación en infraestructura, es un país que concentra una comunidad muy interesante de gente: emprendedores, empresarios, artistas, intelectuales. Es un entorno comunitario muy amigable y que te da todo para desarrollarte, como familia y como emprendedor.


¿Qué proyectos tenés en el país?


Actualmente estoy con E-ONE (la E es por electric, energy, evolution, environment), que es una compañía que desarrollará una red de recarga para vehículos eléctricos. En la región, Uruguay está muy avanzada en la materia, con un parque creciente de vehículos eléctricos. Obviamente es un proyecto que apunta a la sustentabilidad en general y al desarrollo de las energías renovables en particular, abandonando los combustibles fósiles contaminantes. Los primeros cargadores estarán funcionando en junio. En 2030 se estima que habrá 100.000 autos eléctricos en el país y hay una demanda insatisfecha. Vamos a instalar estaciones de altísima velocidad de recarga en la vía pública, tiendas comerciales, shoppings. En un primer momento comenzaremos con las zonas metropolitanas, y eventualmente el corredor con el Este. La idea es complementar la oferta de recarga eléctrica con UTE, garantizando la interoperabilidad. Queremos que Uruguay sea la punta de lanza para luego llegar a otros países de la región.




 
 
 

コメント


bottom of page